La ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Julieta Brodsky Hernández, en compañía del ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes Cisternas, detallaron hoy el plan de acción que se implementará en la Zona Típica de Castro, la que comprende 32 hectáreas del casco histórico de la ciudad y en la cual se ubica el Monumento Histórico Iglesia San Francisco de Castro, uno de los bienes culturales y patrimoniales más importantes del archipiélago.   

El anuncio que se realizó en el edificio del Cecrea de Castro, se dio en medio de una intensa agenda de las autoridades en este territorio, enfocada a favorecer espacios de diálogo con vecinos y vecinas, organizaciones de la sociedad civil, comerciantes, autoridades locales, regionales y parlamentarios. El objetivo fue llegar a puntos de encuentro con la comunidad y así resguardar y potenciar el desarrollo de Chiloé y su patrimonio.

“Quiero agradecer a todos los parlamentarios que nos han acompañado en esta jornada, por el compromiso de estar aquí y ser facilitadores de los procesos; como también a los dirigentes, quienes han tenido apertura al diálogo”, dijo la ministra de las Culturas Julieta Brodsky Hernández, quien señaló que “están todas las condiciones para avanzar en soluciones y llegar a lo que todos queremos, que es proteger esta ciudad sin poner en peligro a las personas ni al desarrollo”.

En este contexto, la ministra de las Culturas dio a conocer una serie de medidas en torno a la Zona Típica, entre las cuales destacan el fortalecimiento de la Oficina Técnica Provincial del CMN, priorizando la contratación de profesionales locales, capacitados en el tratamiento de zonas típicas. También se explorará la emisión de una resolución que habilite a la Oficina Técnica Provincial para revisar modificaciones menores en las viviendas, como por ejemplo, cambiar una ventana o tejuela, entre otras, y dar una respuesta ágil a este tipo de requerimientos. Además, se elaborará un expediente de manera participativa con la comunidad, para implementar Normas de Intervención y Lineamientos de Manejo de la Zona Típica, contemplando la diversa arquitectura de la zona, manteniendo para esto reuniones quincenales con la Secretaría Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales y las juntas de vecinos que habitan estas hectáreas. La Oficina Técnica Provincial deberá generar una campaña de sensibilización y comunicación en torno a lo que implica esta declaratoria.

Por su parte, el ministro de Vivienda se comprometió a facilitar el proceso de modificación del plan regulador, con el objetivo de garantizar normas de conservación del patrimonio; y explorar un plan de mejoramiento de las viviendas y sus sectores de la localidad. De manera conjunta, ambos ministerios se comprometieron a realizar asistencia técnica a la localidad para postular a recursos, en el marco de los programas ya existentes.

“Han sido reuniones muy positivas”, dijo el ministro de Vivienda, Carlos Montes, quien valoró las instancias de diálogo con la comunidad. “Estuvimos en primer lugar con los dirigentes, con los concejales y con el alcalde, lo que permite ver que hay muchos puntos de acercamiento y que es posible encontrar muy buenas soluciones para todos. Porque tal como ha dicho la ministra, aquí hay soluciones y todos los actores han valorado la posibilidad de ser parte de este diálogo franco”.

"En nombre de nuestro consejo municipal, le quiero dar las gracias a la ministra y al ministro por la fuerza, fortaleza y grandeza que han tenido de venir", dijo el alcalde de Castro, Juan Eduardo Vera, quien agregó que "Castro merece tener identidad; merece proteger y cuidar su patrimonio, y eso lo vamos a lograr todos juntos trabajando en equipo. El diálogo nos ha permitido, como siempre, avanzar".

 La Zona Típica de Castro considera los valores históricos y sociales, urbanos, arquitectónicos y paisajísticos que configuran el carácter ambiental y propio del área. A su vez, colabora indirectamente en el desarrollo urbano armónico y regulado del Casco Histórico de Castro, protegiéndolo y regulando las alturas de edificación y los atributos de su arquitectura, dando resguardo al valor de su paisaje.

La declaratoria de esta Zona Típica es, además, uno de los compromisos del Estado de Chile con Unesco, con el que se garantiza la protección del valor universal excepcional definido para el Sitio de Patrimonio Mundial, declarado el año 2000 y que incluye a 16 iglesias del archipiélago.

El diputado Jaime Sáez, de la región de Los Lagos, valoró esta acción y la protección que compromete.  “El ser considerado Patrimonio de la Humanidad implica que, como país, tenemos que ponernos las pilas en cuanto a los instrumentos de protección, de ordenamiento. Esta declaratoria de zona típica va en esa línea y me parece que es un paso relevante en la protección, en la visibilización y en el resguardo del patrimonio de todo Castro y de todo Chiloé, que además es patrimonio de toda la humanidad”.